La voz humana, llamadas de un corazón roto

La voz humana

Nadie puede negar que el amor es un tema complicado. Cuando realmente estás enamorado todo es color de rosa, maravilloso e inolvidable, pero si no, padecemos su contraparte como una enfermedad incurable, justo de esa parte nace: La voz humana.
El Foro Shakespeare aloja en sus entrañas esta obra de Jean Cocteau escrita en 1930 que, en manos de Antonio Castro, cobra vida en el Siglo XXI y se transforma en una puesta en escena muy actual.
Karina Gidi es la encargada de llevarnos de la mano a través de las emociones catastróficas de una ruptura. Ella tiene una fuerza interpretativa tan grande que llena el escenario con un gesto de sus ojos; de hecho, su único compañero en escena es un smartphone que Karina manipula hasta hacernos sentir una verdadera presencia al otro lado de la línea.
La actriz se pasea guiada por su personaje en un hermoso cuarto blanco que nos transmite ese vacío aterrador de cuando la persona amada se ha ido. El ritmo de la obra nos guía por las distintas etapas de una ruptura, esas horribles etapas que todos hemos sentido alguna vez y que, por supuesto, odiamos.
Por suerte no sólo verán a una mujer al borde del llanto, también hay instantes divertidos y absurdos que rompen la tensión obsequiándonos un respiro. Sí, aún en las adversidades tenemos la capacidad de reír.
Cualquier corazón roto se tiene que curar, aunque el proceso no sea sencillo o divertido, el tiempo puede ser un gran aliado o un enemigo tortuoso, pero cuando vean La voz humana saldrán del teatro llenos de esperanza y dispuestos a crear, como Karina, un camino diferente, decididos a ya nunca voltear hacia atrás.

Por Arely DomínguezSeptiembre de 2013. PlayBoy

Comentarios

Entradas populares